Días de fútbol

| Off Topic | 3/6/06 | 0 comentarios

Ciclo de cine en el Instituto Goethe

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El director de cine alemán Sönke Wortmann (en la foto a la derecha, con su protagonista) combina en su pélícula “El milagro de Berna” el fútbol con mucho sentimiento y una fotografía kitsch impresionante.

En junio, el Instituto Goethe saca el fútbol de la cancha y lo lleva a la pantalla grande. En forma paralela a la Copa Mundial y con el apoyo del Ministerio Federal de Asuntos Exteriores, se ofrece una selección de películas alemanas, pero también de Brasil, Holanda y Guinea. Estarán presentes en esta muestra multifacética una película muda de 1927 y producciones recientes, un documental que nos lleva a Bután para una final muy especial, una mirada experimental sobre el futbolista George Best y el cine de entretenimiento de “El milagro de Berna”.

Todas las funciones comenzarán con un corto de SHOOT GOALS! SHOOT MOVIES!, una competencia mundial de cortometrajes alrededor del fútbol organizada por el Talent Campus del Festival Internacional de Cine de Berlín que reunió los aportes provenientes de 75 países.

En el marco del Mundial, el Goethe-Institut proyectará además en directo – en pantalla grande y con entrada libre y gratuita – todos los partidos en los que participen Argentina y/o Alemania.

El ciclo de cine se llevará a cabo todos los martes y jueves de junio, a las 19.30 hs., con entrada libre y gratuita. Películas con subtítulos. Instituto Goethe, Av. Corrientes 319, Tel: 4311-8964.

Programa:

Martes 6 de junio
El milagro de Berna (Das Wunder von Bern)
de Sönke Wortmann, Alemania 2003, 118 min.

El 4 de julio de 1954 el seleccionado nacional alemán disputaba la final del Mundial de fútbol. El gol definitivo de Helmut Rahn que dio el triunfo a los alemanes por 3 a 2 frente a los húngaros, significó mucho más que la obtención de un título deportivo. En tono nostálgico Wortmann cuenta de la vuelta de los últimos sobrevivientes alemanes de prisiones rusas, sus búsquedas por reencontrar un lugar en sus familias y en la sociedad, la reconstrucción del país, y la ilusión del renacimiento como nación generada por el triunfo futbolístico.

Jueves 8 de junio
La otra final (The other final)
de Johan Kramer, Países Bajos, 2003, 87 min.

La otra final es un sensible retrato de un partido amistoso y de dos países, dos culturas. Después de la derrota de Holanda en la clasificación para el Mundial de Japón y Corea en 2002, surgió allí una grandiosa idea. Invitar a los dos últimos del ranking de selecciones nacionales – Bután, un reino en el Himalaya y la isla caribeña de Montserrat – a jugar un “partido decisivo” por el penúltimo puesto de la lista. El partido se jugaría el 30 de junio de 2002 en Thimpu, capital de Bután, en coincidencia con el día en que en Yokohama se celebraría la final del Mundial de la FIFA.

Martes 13 de junio
Zona liberada (Befreite Zone)
de Norbert Baumgarten, Alemania, 93 min.

Se trata de fútbol, o al menos eso es lo que creen muchos de los 35.000 habitantes de Sässlen, una aldea ficticia de Brandenburgo, en la antigua RDA. Desde que el delantero africano Ade Banjo juega en el equipo no han vuelto a perder ni un partido en la liga regional. Debido a sus goles muchos sueñan con la copa nacional, algunos sueñan con fortunas.

Jueves 15 de junio
Boleiros
de Urgo Giorgetti, Brasil, 1998, 93 min.

Maradona, Beckenbauer y Pelé han conseguido estar hasta hoy presentes en los medios de comunicación y así garantizarse su identidad como ídolos del fútbol. Algunos de sus colegas también lo han conseguido aunque sea a nivel nacional. ¿Pero dónde quedaron todos aquellos que un día fueron jugadores famosos en todo el mundo? En un bar de São Paulo se reúnen varios ex-jugadores para revivir los éxitos del pasado. Al mismo tiempo sobrellevan ‘en equipo’ la sensación de que ya no sirven para nada.

Martes 20 de junio
Los once diablos (Die elf Teufel)
de Zoltán Corda, Alemania, 1927, 98 min.

Al principio nos encontramos con el clásico cliché: los pobres frente a los ricos, los honestos frente a los sospechosos. Los primeros no pueden permitirse ningún lujo, los segundos tienen el suficiente dinero como para comprar a un jugador de los mejores. Los primeros han montado ellos mismos una ducha al aire libre, los segundos disponen de piscina cubierta y camillas para masajes. Los primeros son los miembros del club de fútbol de los trabajadores Linda, los segundos juegan en condiciones profesionales para el noble club Internacional. Los primeros confían en una “niña valiente” para darles suerte, los segundos usan a una mujer seductora como anzuelo.

Jueves 22 de junio
Bando y el fútbol de oro (Bando et le ballon d’or)
de Cheik Doukouré, Guinea, 1993, 90 min.

Todo comenzó como una cuestión de fe. El mago de la aldea explicó que Bando había sido elegido por los dioses para llevar a cabo una tarea especial. El niño de diez años define la tarea a su modo: quiere ser futbolista, como Roger Milla, el camerunés que en el Mundial de 1990 en Italia se convierte en el orgullo del continente africano.

Martes 27 de junio
Fútbol como nunca (Fußball wie noch nie)
de Hellmuth Costard, Alemania, 1970, 100 min.

El 12 de septiembre de 1970 es un día soleado en Old Trafford. El Manchester United disputa un partido de liga contra el Coventry y gana 2 a 0. Una victoria sin grandes consecuencias, ya que en esta temporada el Manu jugó un papel secundario en la liga inglesa. Sin embargo, de este partido se ha conservado un documento único en la historia del cine y la televisión. Hellmuth Costard, uno de los directores de cine experimental más importantes del cine alemán durante los años sesenta y setenta, observó durante más de 90 minutos con ocho cámaras de 16 mm al jugador con el número 11, a George Best, el símbolo del clásico volante izquierdo.

Jueves 29 de junio
Un día en Europa (One day in Europe)
de Hannes Stöhr, Alemania/España, 2005, 93 min.

Cuatro historias que tienen lugar en cuatro ciudades de Europa el día de la final de la Champions League entre el Galatasaray de Estambul y el Deportivo de la Coruña en Moscú. “West meets East”. Una película que trata de diferencias culturales y lingüísticas. Una comedia con el fútbol de telón de fondo, que – irónicamente – parece ser lo que más une.

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