Cositas argentinas que cuidan el planeta
En la décima edición de la Feria Puro Diseño, muchos expositores mostraron reminiscencias de conceptos típicos de la Argentina
Por Paula Bonnet
Tal vez fue culpa del Bicentenario y de los festejos que se estaban llevando a cabo en la 9 de Julio, pero la última edición de la Feria Puro Diseño estuvo llena de propuestas bien patrióticas.
Del 20 al 25 de mayo más de tres mil empresas y marcas relacionadas con el diseño expusieron sus creaciones en La Rural. Mientras en el centro porteño se festejaba, alrededor de 700 mil personas llenaron el Pabellón Amarillo de colores y música fuerte.
Fueron muchos los que mostraron reminiscencias de conceptos típicos de este país. Por un lado estuvieron las lámparas y los cuencos de Gbobjetos, que parecen inspirados en las pelotas coloridas usadas por las mujeres norteñas para trenzarse el pelo.
Paez reinventa las tradicionales alpargatas con coloridas estampas. Uno de los objetivos de la marca es mostrar Argentina al mundo y la vuelta de tuerca que le dan a este simple tipo de calzado representa la cara ingeniosa del país.
Los accesorios que diseña Valeria Nicali recuerdan a las bolsas que llevaban las abuelas al supermercado. Están hechos con el mismo material que años antes cargaba verduras y carne, pero que ahora compone versátiles complementos para utilizar en cualquier ocasión.
Azzularq presentó sus textiles inspirados en el tango, los hilados sureños y que, además, son de bajo impacto ambiental.
La sustentabilidad ecológica de los objetos fue otra tendencia que se multiplicó en los stands de la Feria. Los anotadores y agendas de Cuadernos mucho están hechos, en su gran mayoría, de papel reciclado. Se destacan los que sobre el lomo tienen escrito “200 cosas antes de morir”.
Buna reúsa caucho y lo utiliza de base para crear macetas, bancos y mesas geométricos que no se parecen a nada antes visto.
Por el lado de la indumentaria estuvo presente 12-Na, ropa para chicos, hombres y mujeres. Las prendas parecen llenas de pitucones y arreglos, pero en realidad son piezas reinventadas. En el stand, en vez de entregar panfletos de papel, se repartieron pequeños retazos de tela con la información de la marca. Eso sí que es publicidad sustentable.