Los rostros de Gerhard Richter

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La exposición “Sinopsis” en el Museo Nacional de Arte Decorativo

Por Sandra Henoch

Como el propio Gerhard Richter afirma, trabaja sin plan ni sistema. Eso es difícil de creer cuando uno visita la muestra de sus obras en el Museo Nacional de Arte Decorativo. El Instituto para las Relaciones con el Extranjero de Alemania presenta en el subsuelo restaurado del Museo la exposición organizada por el Goethe-Institut Buenos Aires. Distribuido en varias salas, las imágenes, fotografías y pinturas de Richter reflejan su obra de vida. La mezcla de óleos, grabados y fotografías, principalmente de los años noventa, muestra la versatilidad del “Picasso del siglo XXI”, considerado uno de los artistas alemanes más importantes del presente.

Las luminosas salas del Museo dan suficiente espacio a las imágenes que se acoplan a la música de fondo. No se puede reconocer una disposición única de las obras según estén colocadas por períodos o materiales. Más bien, alternan las pinturas abstractas con fotografías y grabados y, por eso, la exposición parece ser tan viva.

Las técnicas de distanciamiento, que Richter emplea en parte de sus obras, podrían interpretarse como el hilo conductor tanto de su obra como de la exposición. Y esto es lo que persiguen los trabajos de Richter que se rehúsan a un estilo artístico individual o, en lugar de eso, provocan una variedad pictórica que es muy discutida entre los críticos. Una video-instalación en la parte de atrás muestra el proceso de concepción del vitral de la Catedral de Colonia, Alemania, que proyectó en 2006 el coloniense por elección. Asimismo, también pueden apreciarse obras plásticas de Richter, quien aprendió pintura en la Academia de Arte de Dresden.

Es indiscutible que Richter ya en vida es una leyenda de arte. Nacido en Dresden, estudió y trabajó en la RDA, creó gran cantidad de obras que se subastaron por cifras exorbitantes. Cuando se escapó a Alemania Federal, casi todos sus trabajos fueron destruidos, otros los quemó él mismo. Sin embargo, la fuga y la consiguiente reorientación le permitieron trabajar en sistemas políticos y sociales distintos y plasmar sus influencias. Esto lo logró no solo como artista, sino también como maestro y profesor universitario. Junto con Sigmar Polke, Konrad Fischer-Lueg y otros, formó el grupo de arte “realistas capitalistas” que lleva la marca del escepticismo ideológico de Richter.

  • “Gerhard Richter – Sinopsis”. Museo Nacional de Arte Decorativo, Av. del Libertador 1902. Martes-domingo 14-19 horas. Entradas $5, martes gratis. Del 10 de junio al 25 de julio. 1 de agosto, 18 horas: conferencia y guía del biógrafo de Richter Dr. Dietmar Elger.

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