Máquinas de conformar sueños (1998)

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Grabados de Marta Pérez Temperley en Atica

Por Susanne Franz

La invención del telar mecánico (1785) o de la máquina al vapor (1765) transformó el mundo: desencadenó la revolución industrial. Desde entonces sigue vigente la discusión sobre el desplazamiento del hombre por la máquina. En la actualidad, en un mundo globalizado, con computadoras cada vez mejores, es más urgente que nunca. Y al mismo tiempo el mundo se achica, hay cada vez menos espacio para cada vez menos privilegiados.

Hoy en día se observa una especie de nostalgia romantizada por los tiempos de los monstruos de hierro y acero, los colosos retumbadores de antaño. Así, por ejemplo, en la muestra “Máquinas de conformar sueños”, de la talentosa grabadora Marta Pérez Temperley. En sus obras de gran formato usa técnicas como el grabado en cobre, aguafuerte o acuatinta. Agrega escasos colores (bronce, plata, marrón rojizo), logrando que sus máquinas parezcan saltar del plano y dándoles brillo, como si fueran reliquias de una época pre-virtual.

Publicado en “Argentinisches Tageblatt” en agosto de 1998.