Luz garantizada (2000)
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MAS MAS LUZ – la exposición fotográfica de Ernesto Levy en Filo
Por Susanne Franz
El artista visual Ernesto Levy, radicado en Tel Aviv, vuelve a exponer en Buenos Aires, su lugar de nacimiento, y esta vez en la galería de arte del Café Filo. Ahí corre aire fresco y reina un ambiente creativo, los gestores rastrean las nuevas ideas y conceptos. Con las fotografías de Ernesto Levy, tuvieron una idea feliz. Es difícil encontrar exposiciones de semejante calidad en Buenos Aires.
Luz-iluminación es el tema que reúne las obras de distintos períodos de producción artística. Las imágenes siguen un orden esencial, no cronológico. En cada obra, el artista se encuentra con el observador en una relación de comunicación. Esto excede “la historia” que cuenta una imagen o la interpretación que el receptor asocia. Esta comunicación es, más bien, un proceso directo y físico sin ninguna estación en lo racional. No hay vueltas para llegar a las “almas”.
Normalmente, una imagen se dirige a través de la retina y del nervio óptico a una especie de controlador, allí la clasifica y la ordena, por lo general, por medio del reconocimiento. Una imagen completamente nueva, en verdad, no puede ingresar a nuestro mundo sensorial sin llamar la atención. Por medio de su técnica, que Levy fue desarrollando con experimentos durante años –también aprendió fotografía en la Escuela de Artes de Tel Aviv–, el artista logró eliminar el camino que va al raciocinio.
La luz en sus imágenes le permite al observador identificar la esencia de la luz-iluminación. La luz se transfiere directamente a su propio interior y puede ser comprendida como sentimiento o tono.
Así de difícil es encontrar palabras racionales para un proceso tan íntimo; más aún, intentar describir los materiales y texturas que “habitan” en las obras de Levy. Capas como de gel o de nubes en un espacio que las dimensiones “normales” no pueden describir parecen crear atmósferas de otro universo.
El cuerpo humano como punto intermedio de numerosas obras genera la sensación de estar en paisajes internos y, de hecho, renueva el re-conocimiento de lo familiar en el nivel sensible.
Publicado en “Argentinisches Tageblatt” el 22 de abril de 2000.
