Pesadilla poética (1997)

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Los grandes dibujos chicos de Armando Sapia

Por Susanne Franz


“Sueños de grandeza”.

La obra de Armando Sapia del año 1997 golpea fuerte. Pero al mismo tiempo es mejor que nunca. Sus tintas flotan sin gravedad, sin esfuerzo alguno, parecen haber nacido de imágenes soñadas. No desvaloriza su seriedad como gran artista la orientación más fuerte hacia el género del comic —y tampoco se alivia en lo más mínimo el horror que transmiten estos “pequeños” dibujos.

Armando Sapia vuelve con el formato que mejor transmite la intensidad de sus obras: el dibujo relativamente chico.


“Un domingo en la montaña”.

El año pasado mostró —también en la galería Atica— obras más grandes, donde se perdió un poco su estilo caracterizado por trazos instintivos.

Ahora, Sapia da la prueba, con toda frescura, de que menos es más. Hoja por hoja, ofrece al espectador escenas densas, pesadillescas, llenas de triste poesía. Casas en llamas, montañas de muertos, masas de personas que corren sin sentido por calles serpenteantes, tramos de alambre de púa, arboles muertos, choques de autos.

Los dibujos de Sapia son sobrepoblados como la Tierra. Abundan en ellos seres robóticos monstruosos, que trabajan con toda energía en la destrucción del medio ambiente. No son víctimas desamparadas. “Estamos a pocos pasos del fin”, advierten estas obras apocalípticas.

Artículo publicado en el “Argentinisches Tageblatt” del 4/10/1997.

Los dibujos provienen del sitio de Armando Sapia.

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