Entre el “kitsch” y la religión (2002)
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La instalación “Cayetano” de Omar Panosetti
Por Susanne Franz
El 7 de agosto de cada año, en el Día de San Cayetano, muchos argentinos creyentes se embarcan en una gran procesión a Liniers para pedir a su Santo pan y trabajo. Se forman filas de kilómetros de largo delante del altar, donde los peticionantes dejan regalos como pequeñas imágenes coloridas de santos, para que San Cayetano sea benigno con ellos y escuche sus pedidos.
La instalación “Cayetano”, de Omar Panosetti, combina impresiones medio “kitsch” de los mitos y leyendas de un pueblo que mantiene la fe y la devoción en medio de una situación desolada con referencias atrevidas y irrespetuosas a un Monumento al Trabajador en la tradición de la arquitectura monumental socialista —un proyecto que nunca fue concretado—, motivos eróticos y anécdotas urbanas que conviven impresas sobre remeras. Apoyadas en una pared, hay gavillas de trigo. Como siempre en la obra de Panosetti, se unen la crítica social y el agudo análisis político con una buena dosis de humor inteligente e ironía sutil.
En el marco de la muestra “Documentos” en la “Fundación Federico Jorge Klemm”, se ven además de la instalación de Omar Panosetti, pinturas de Patricio Larrambebere y fotografías intervenidas de Eduardo Molinari.
Publicado en “Argentinisches Tageblatt” el 11/5/2002.
